En la primera clase hemos dado la bienvenida a Giulia. Nos han cambiado de clase: la nueva aula está en el tercer piso, haremos deporte para llegar, y se halla expuesta al sur (ideal para broncearse o echar una cabezadita al sol).
Con la entrevista a César Bona hemos subrayado algunas frases del texto, como la que afirma que el respeto es fundamental en clase. Hemos aludido a la inteligencia emocional necesaria para gestionar las emociones. He aquí una entrevista interesante a Daniel Goleman.
Hoy hemos escuchado un texto de Ángeles Mastretta, leído por Lella Costa: el cuento de la "Tía Daniela", recogido en la obra Mujeres de ojos grandes.
La tía Daniela se enamoró como se enamoran siempre las mujeres inteligentes: como una idiota. Lo había visto llegar una mañana, caminando con los hombros erguidos sobre un paso sereno y había pensado: “Este hombre se cree Dios”. Pero al rato de oírlo decir historias sobre mundos desconocidos y pasiones extrañas, se enamoró de él y de sus brazos como si desde niña no hablara latín, no supiera lógica, ni hubiera sorprendido a media ciudad copiando los juegos de Góngora y Sor Juana como quien responde a una canción en el recreo.
Era tan sabia que ningún hombre quería meterse con ella, por más que tuviera los ojos de miel y una boca brillante, por más que su cuerpo acariciara la imaginación despertando las ganas de mirarlo desnudo, por más que fuera hermosa como la virgen del Rosario. Daba temor quererla porque algo había en su inteligencia que sugería siempre un desprecio por el sexo opuesto y sus confusiones.
Pero aquel hombre que no sabía nada de ella y sus libros, se le acercó como a cualquiera. Entonces la tía Daniela lo dotó de una inteligencia deslumbrante, una virtud de ángel y un talento de artista. Su cabeza lo miró de tantos modos que en doce días creyó conocer a cien hombres.
Lo quiso convencida de que Dios puede andar entre mortales, entregada hasta las uñas a los deseos y las ocurrencias de un tipo que nunca llegó para quedarse y jamás entendió uno solo de todos los poemas que Daniela quiso leerle para explicar su amor.
Un día, así como había llegado, se fue sin despedir siquiera. Y no hubo entonces en la redonda inteligencia de la tía Daniela un solo atisbo de entender qué había pasado.
Hipnotizada por un dolor sin nombre ni destino se volvió la más tonta de las tontas. Perderlo fue una larga pena como el insomnio, una vejez de siglos, el infierno.
La primera unidad del Libro Prisma Plus 2 se centra en el condicional. Ese mismo tema se halla en el capítulo 8 del libro de vacaciones de Gramática Práctica. Por si alguien se ha perdido la explicación, he aquí un resumen.
Hemos visto y comentado algunas fotos de la sangrienta contienda civil que asoló España desde julio de 1936 hasta el 1 de abril de 1939.